El parlamento iraní aprobó una ley que autoriza el cierre del Estrecho de Ormuz en respuesta a posibles ataques de Estados Unidos. Esta decisión ha generado preocupación internacional, dado que el estrecho es una ruta crucial para el comercio mundial, transportando alrededor del 20% del petróleo global. China, en particular, ha pedido mantener la seguridad y estabilidad de Oriente Próximo y ha rechazado la amenaza iraní de bloquear el estrecho, lo que ha contribuido a un cierto alivio en los mercados. La importancia estratégica del Estrecho de Ormuz y la preocupación por las implicaciones económicas del cierre del mismo son temas centrales en las noticias.